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Principito desencantado

Historias de un principito sin reino y sin princesa

10/07/06 Días extraños

Después de la excitante noche del jueves el fin de semana parecía que podía estar interesante pero nada más lejos de la realidad.

Viernes. La noche se arruinó muy pronto. Apareció "mi rubita preferida", aquella con la que compartí un pedacito de mi vida durante casi un par de meses. Hasta aquí todo normal pero algo había cambiado. Nos la encontramos en el ultimo bar de la noche y pienso que no fue de forma casual, además vino huyendo de un pesadillas y fuimos su tabla de salvación. No me hablaba, ni siquiera me miraba. No entendí ese comportamiento infantil y más cuando yo siempre fui sincero con ella. En resumen, me jodió la noche y como me di cuenta que sobraba, en cuanto pude me fui a casita.

Sábado. Trabajé y salí de casa alrededor de las 2.30. Pues bien, mi amigo "J" estaba con unos conocidos en un bar que no me gusta demasiado. En un rato cambiaremos pensé. Pues no. Cuando quisimos salir eran ya las 4.10 y todo estaba cerrando. Encontré a "Z", la chica del jueves; según ella estaba muy raro, aunque lo que ella quiere decir es que no me encontró demasiado receptivo. La he dicho que no fue por ella sino por la situación aunque sigue sin creerme. Continuo. Fuimos a la discoteca. Hablé con un montón de conocidas pero creo que me utilizan como chico que "las comprende", la que más "ricitos" aunque luego es la que menos caso me hace, por lo menos el caso que a mí me gustaría. Además tampoco apareció "Z" para repetir lo del jueves e irnos con una sonrisa para casa. En fin, por lo menos en la recta final de la noche me eché unas risas, tontas, pero a la postre satisfactorias.
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