<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d36639360\x26blogName\x3dPrincipito+desencantado\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://principitodesencantado.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://principitodesencantado.blogspot.com/\x26vt\x3d6790624664050696456', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Principito desencantado

Historias de un principito sin reino y sin princesa

Me caliento

Y es que llegar a casa a las nueve de la mañana y ponerme a escribir es demasiado malo. Creo que lo hago como formula de escape ante la soledad de mi habitación y a modo de reflexión, como un lugar donde poder llorar y desahogarme... Mi sensación es de derrota. Pienso "un día mas, veinte euros menos y diez horas de tontería entre copas". Incluso a pesar de volver a compartir mis labios con otra persona, al final ¿qué me queda? Poca cosa. Quizás algo que contar. Que triste es todo.

A pesar de esto pienso de manera diferente a vosotros. Creo que cambiar de ciudad me produciría volver a encontrar una ilusión, levantarme con las pilas cargadas, conocer a gente diferente, trabajar, tener dinero, poder disfrutar más de la vida, conseguir una autonomía que ahora no poseo. No sé si me explico bien pero creo es un cambio que debo hacer.

A esto se une esta ciudad, el carácter de sus gentes y la increíble sensación (absolutamente cierta) de que conoces a todo el mundo y que ni nada ni nadie te va a sorprender. Sueño con ir a vivir a Lisboa, a Madrid, a Santander o quizás a Barcelona. Ir a una ciudad donde un domingo haya algo más que hacer que sentarte en el sofá a ver la televisión o donde quizás tenga a alguien con quien compartir una tarde de paseo por la orilla del mar.

Este principito necesita un planeta nuevo donde luchar contra la rutina o más bien contra ésta rutina.
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »
| siguiente »

Anonymous Anónimo

si toca madrid yo me pido acompañarte en el paseo por la orilla del mar...    



Blogger Principito Desencantado

Jajaja vale vale, eso esta hecho. Un beso!    



Blogger Candela

Si quieres venirte a Barcelona, aquí te espero. Petonets.    



Anonymous Anónimo

No escuches a nadie a la hora de tomar tu decisión. Huír es de cobardes y no huír te hará un desgraciado por vivir entre recuerdos. Estos estan en tu mente pero tal vez si te alejas, disminuyan, bueno, tal vez no, seguro que si te alejas los recuerdos van alejándose poco a poco. Pero, recuerda, tal vez empezarías de nuevo, conocerías a alguien, desearías compartir con ese alguien muchísimas cosas... pero tarde o temprano, el pasado siempre llama a tu puerta, siempre viene a reencontrarte, siempre debes enfrentarlo. No sé que aconsejarte porque yo me iría, aunque también sería consciente de que mi huída no sería un final, aunque... ¿quién sabe en que punto acaba una historia? Besos!    



» Publicar un comentario